miércoles, 2 de abril de 2008

La habitación de las mil páginas

Muchas veces he leído las opiniones de "expertos en educación", abogando por medidas para crear hábitos de lectura en los niños. Y cada vez le hallo menos peso a sus argumentos.

Mi papá trabajaba un kiosco en la Gran Vía. Mi mamá estaba hospitalizada después de dar a luz a mi hermano, por lo que yo acompañaba a mi papá. Un kiosco de 1,5 x 1,5 mts. era casi una cárcel para un niño de 4 años, así que me ponía a jugar con las cajetillas de cigarros o lo que tuviera a mano. Hasta un día en que mi papá, tal vez exasperado por mis incesantes preguntas, me pasó una revista de historietas. Mi inagotable curiosidad halló un obstáculo insalvable, no sabía leer. Y mi papá estaba demasiado ocupado atendiendo el kiosco, como para leerme. Y así comenzó la larga espera, llegué a kinder con la mente fija en 1º Básico, porque me habían dicho que en ese nivel uno aprendía a leer. Esa era mi misión, mi leit motiv, mi obsesión. Al llegar a 1º Básico aprendí a leer en tiempo récord. Y por obra y magia de la lectura, aquel reducido espacio de 1,5 x 1,5 se transformó en una puerta hacia nuevos mundos.

Mediados de la década de los 80', se acercaba el final de la dictadura. Mi abuelo pinochetista imponía su voluntad de hierro en la casa, donde vivíamos junto a mis padres.Cuando él se iba a su otra casa, yo aprovechaba para escabullirme en una pieza a la que él nos había prohibido entrar a mí y a mi hermano. Esa pieza, a la que yo bauticé la habitación de las mil páginas, estaba repleta de revistas, libros, discos, fotos, dos radios antiguas, relojes, abrigos, sombreros, etc. Teniendo en cuenta la precariedad de la época, los libros se transformaron en mi vía de escape pero también en fuente de enseñanzas e inspiración.

¿Y a qué viene tanto racconto autobiográfico? Para demostrar que el gusto amor por la lectura no nace producto de políticas o normas sino de una inquietud propia. Por supuesto que mientras más personas tengan más y mejor acceso a los libros podremos esperar una sociedad más preparada, más culta y por ende, menos discriminatoria. Pero el amor por la lectura no se enseña ni se aprende, a lo más se inspira.

Al morir mi abuelo, la habitación de las mil páginas se transformó en mi dormitorio.

A pesar de que hoy existen multitud de opciones como Youtube, yo no abandono el placer de leer para, en pleno acto de complicidad con el autor, imaginar mundos y épocas ajenas hasta hacerlas tan vívidas que se transformen en propias.

12 comentarios:

Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com dijo...

Yo aprendí a leer con el querido Silabario HispanoAmericano, y luego me devoraba las revistas de historietas, además que en mi casa siempre hubo libros. Ahora que gano mi sueldo me dejo un item para CDs y otro para libros, todos los meses.
Saludos

Jaime Ceresa® dijo...

Más allá de mi opinión sobre las políticas de lectura, las cuales las comparto contigo, me quedo con lo fascinante de tu historia...me encantó weon...

Cuídate.-

Bandolera dijo...

Te apoyo completamente. Yo amo leer. Cuido mis libros y me llevan a lugares incríbles, enseñándome siempre algo nuevo. Me gustó mucho tu post, de verdad.
Creo que el error está en la mala selección de lectura para niños. Así les crean un trauma. Mi mamá me dio como primerlibro una versión muy agradable del mago de oz. Un mundo lleno de fantasías....de ahí comenzó esta mágica relación que espero nunca acabe.

Alejandra dijo...

Qué buena tu historia de esperar desde los 4 años para poder leer. Sí, estoy de acuerdo que ni con maletines ni con libros regalados alguien se va a motivar si no le gusta. El impulso tiene que nacer de uno. Tampoco estoy de acuerdo con los que dicen que si la gente no lee libros "serios" no vale, uno escoge lo que quiere no más...
Saludos

Perico dijo...

Nuy buen post amigo JC. Me hace acordar cuando me inicié en el mundo de la lectura a mis tiernos 4 años. Tuve la suerte de tener un abuelo dedicado a mi aprendizaje que al verme preocupado por tratar de saber lo que decían sus libros de su biblioteca me enseñó a leer.

Puedo decir con orgullo que pese a que no leo ccon la asiduidad de antes sigo con este hobby. Eso sí textos educativos o de contenído histórico, aún no creo que sea mi momento para la lectura de ficción.

Salud!os y felicitaciones por el post.

Anónimo dijo...

Yo tuve la première de este relato en contexto original, ya sabía todo lo relatado aquí y me parece grandioso.
Yo aprendí a leer por mi madre a eso de los cuatro al igual que muchos, pero yo antes de eso ya me sabía todos los continentes con todos sus países y todas sus capitales. No es que me vanaglorie con esto pero soy muy hiperquinetica y mi madre y mi hermana cada día al intentarme hacerme dormir agotaban todas sus fuerzas, tanto era así que dormían antes de que yo recién me cansará.
Así comenzó la tarea de mi madre de cansarme mentalmente sin barbitúricos ni nada raro que creo le administran a los peques con ese grado de actividad -Ritalin- en fin...
A la hora de dormir cada noche mi mamá empezaba a preguntarme, "Dime los continentes", a lo que yo cuál loro comenzaba a decírselos, luego me decía, "ya; ahora dime las capitales de los países que voy a ir diciendo…", y así hasta que terminábamos con todos, en ese entonces con visita que llegaba a mi casa mi madre se lucia de lo lindo con la niñita que parecía atlas... pero cuando ya hube aprendido todos los países con sus capitales, mi mamá no opto por nada más que los cuentos y libros...
Obviamente como en ese entonces ella leía más rápido que yo, me leía un capitulo cada día, ya fuera Colmillo blanco (Jack London), La vuelta al mundo en 80 días(Julio Verne), Tom Swayer(Mark Twain) que era mi favorito, entre otros, y como obviamente era hiperquinetica y me costaba dormir, me leía sólo un capítulo y me decía "¿Quieres saber que pasa luego?... Entonces duérmete luego porque mañana te leo el otro capitulo, y mientras más rápido te duermas faltará menos para que sea mañana y te cuente que sucede" Inteligente estrategia la que ella utilizo ya que así provoco el ahínco en mi de saber más de que ocultaban las palabras en esas hojas... y también nació la sed de conocimiento.
Al poco tiempo comencé a leer y pude estar en vela por mucho leyendo y descubriendo historias que veía tan vividas en mi.
Alicia en el país de las maravillas (Lewis Carroll), Drácula (Bram Stoker), La Porota (Hernán del solar), y muchos más que cultivaron mi mente e imaginación.
A los niños no se los puede obligar a leer La guerra y la paz (Liev Tolstói) -a ti tampoco te puedo decir que la leas XD-, ni mucho menos las égloga de Lope de Vega, la idea es crear el habito con cosas que despierten el interés incluso monitos, yo guardo como tesoros todos mis libros de pequeña entre ellos tengo historietas de Garfield y Mafalda.

Excelente post amigo no es sólo un lindo relato si no una historia de los más verdadera que hay y llega ^^

Te quiero mucho y estoy demasiado triste...

Juan Carlos dijo...

Daniel: Yo sólo "vitrineo" libros, que luego descargo de la red(¿se alcanza a ver el parche en mi ojo izquierdo?). La música de las tiendas me parece demasiado limitada como para tomarla como referencia, además Ares y Emule son las mejores disqueras.

Saludos.

Jaime Ceresa: Jajajaja me alegra que te haya gustado.

Agregué el link =)

Nos leemos.

Bandolera:Comparto tu impresión sobre la elección de los libros. Lamentablemente terminan primando el bolsillo de las editoriales o el ego de los escritores, por sobre el interés de incentivar la lectura. La pasada discusión sobre el maletín literario daba vergüenza ajena.

Un abrazo.

Alejandra:Soy de naturaleza autodidacta por lo que dicha espera fue desesperante, pero fructífera al fin. Yo leo de todo, desde libros infantiles, cómics, blogs, revistas(científicas,de chismes,deportivas,etc.) hasta novelas, manuales de instalación(siii, soy del 1% que los lee!), ensayos, crónicas.

Al final más que lo que se lee es el cómo se lee. Osea, de nada sirve leer a Kant si no se logra entender sus ideas. Es como leer Condorito con ánimo grave y pseudointelectual. Cada escrito demanda del lector cierto grado de complicidad.

Saludos.

Perico: aún no creo que sea mi momento para la lectura de ficción Uuuh es que no has leído a Asimov o Arthur C. Clark o William Gibson. Si te gusta la ciencia, te encantarán estos autores de ciencia-ficción. Ahora si te gustan las crónicas, Lemebel es buena opción.

Salud!os cumpa

Súper Waxona:Si, tuviste la avant premiere de este relato ;D

Libros en vez de Ritalín, sabia decisión.

Lewis Carrol: ése tomaba ácido u opio. Osea, ¿conejos con relojes?
Bram Stoker: Sexópata caníbal reprimido jajajaja
Leiv Tolstoi: Le pagaban por página parece, que manera de alargar las historias XD

No me pediste que leyera La guerra y la paz pero sí, El diablo en invierno..¿por qué será?

Zaidi, sé que estás triste pero si tomaste esa decisión es porque hubo buenas razones. Si necesitas ayuda sabes como hallarme.

5 besos ;D

rodrigo ramos bañados dijo...

buena historia, podrías hacerla cuento, no sé, igual eso del kiosko me gustó harto
saludos

Juan Carlos dijo...

Tuto: También lo pensé, pero desde hace un buen tiempo ando difuso. Empiezo cuentos que después dejo a medio hacer, y no es la idea. Por eso opté por no hacerlo cuento, por ahora.

Saludos.

Perico dijo...

juan Carlos: si he leido a algunos autores que citas, pero por ahora me enfoco en adquirir mas conocimiento y es por ello que no estoy muy enfocado en la ficción.

Necesito por ahora un poco mas de verdad.

Anónimo dijo...

Juan Carlos .... buena tu historia ...es inspiradora ...pero no estoy completamente de acuerdo con algunos comentarios que vi ....sobre todo las que van en contra de la iniciativa del maletín literario.....Quizás el maletín literario no sea la forma mas adecuada ...pero me parece que criticar porque si y encontrar todo malo sin aportar o contribuir alguna solución no ayuda ni aporta NADA........ el maletín literario por lo que entiendo es un "regalo" que se hace a los estratos mas bajos de nuestra sociedad, para acercarlos a la lectura ....he escuchado a muchos decir que: ...¿de que sirve esto si quizás a las personas luego tomen estos libros y los vendas???? .........quizás pase...,en algunos casos,... pero se que también muchos van a tomar estos libros y les darán un buen uso ....quizás estos libros inspiren a muchos niños y sacien su sed de conocimiento y entretención....quizás cuantos de los beneficiados tambien son hiperkinéticos tambien, pero simplemente no tienen alguien que les enseñe a leer o los incentiven .......

por algo hay que empezar o no???

bueno eso nomás....
salu2

P.d.: oye ..y contesto la perrita infiel???

Firma Quest

Juan Carlos dijo...

Perico: Entonces lee "Una breve historia del tiempo", yo lo tengo pero en English, si te interesa me avisas.

Salud!os

Quest: ¡Tantas lunas!

Creo que el Maletín Literario tiene un fin social y cultural, como bien señalas todo dependerá del uso que los beneficiados le den. Ahora, tampoco se puede soslayar el hecho de que las familias a veces deben vender sus pocas pertenencias para mitigar el hambre. Suena muy duro, pero es difícil estimular las neuronas cuando el estómago reclama. Obviamente el problema no es el maletín en sí, sino la mezquindad de quienes detentan el poder, ya que no se puede esperar que un niño tenga ganas de leer si está pasando hambre. Al final el maletín es casi una metáfora de la situación de la educación en Chile(escasa infraestructura, escasa calidad,etc). A pesar de todo lo anterior, creo que si el Maletín estimula aunque sea a uno de cada 100 niños, habrá cumplido su cometido.

PD: Jajajaja aún no, cuando lo haga serás el primero en enterarte =)

Un abrazo.