La pérdida del respeto por lo histórico y lo divino.

Pensé en un comienzo aportar por primera vez a este blog con algo más alegre, algo más de mi estilo por decirlo de alguna manera. Pero la trizte realidad me obliga a otra cosa (por cierto escribir que pensaban... je, je), el anunciar publicamente algo que es un secreto a voces ¡¡la pérdida del respeto por lo histórico y lo divino!!. LLego a Rancagua tierra muy querida y familiar por cierto, con las ganas de explorar despues de siete años sus rincones tan añorados y muchas veces soñados, como olvidar la plaza de armas con su gallardo O'Higgins en el centro y sus árboles milenarios, la iglesia de "La merced" con su altivo tajo de lado a lado luego del histórico terremoto, la calle cuevas con sus casas antiguas y su olor a pasto recien llovido... en fin tantas cosas, tantas diferencias. Hoy la realidad me indica que la plaza con árboles milenarios y el gallardo O'Higgins no es más que un montón de pastelones de cemento que perfectamente pueden pertenecer a otro país, de los árboles nada, solo dos piletas todas roñosas que tiran un chorro de agua cada tanto que si te pillan mal parado te sacan un ojo, lo único que falta es que el O'Higgins gallardo de otras épocas se baje del caballo y se mande a cambiar por la aberración e insulto cometidos, de la histórica calle Cuevas la cual se gana un espacio en nuestras epopeyas nacionales al posibilitar la huida de los guerreros que participaron del desastre de Rancagua... Cuea, si eso, lo que leen, porque en honor a su fama de cuea se mantiene en pie y no la han destrozado o vendido al mejor postor como quien se pone en una casa de remates o en una feria de variedades, lo malo en este caso que no se vende frutas ni verduras si no que patrimonio nacional y la moneda de cambio es el olvido, pero por lo que he averiguado no crean que no le tienen hambre. Eso en relación a lo Histórico, en cuanto a lo divino aunque no lo crean menos respeto, la iglesia de La Merced la que según la historia desde su campanario sirvió de puesto de comando para O'higgins en la batalla del sitio de Rancagua (por no decir desastre), ni que hablar con tantas "remodelaciones" lo de su tajo antiguo y venerado es pasado, no se si le hicieron un "lifting", "estucada de somier" (porque no puede ser estirada por razones obvias) u otra cosa pero está más reluciente que la moneda, perdiendo toda esa mistica antigua e histórica. Con estos eventos y muchos otros que ya no me dan las fuerzas patrióticas de escribir mi querida Rancagua está viviendo nuevamente el desastre que la posicionó otrora en la historia de Chile, pero que de seguro en la actualidad el único espacio que se gana es ser una ciudad satélite más de la mancha voraz llamada Santiasco, perdiendo así toda su identidad y peso específico en la tan querida y gloriosa História de Chile.


Gracias por el tiempo de ocio invertido en leer este post, vendran otros...
su humilde servidor del mas acá.

Nag_beth